La Giralda es el emblema de la ciudad de Sevilla. Es una perfecta representación de la mezcla de culturas que la ciudad ha presenciado a lo largo de su historia. Domina todos los edificios del centro de la ciudad desde su altura de 97,5 m (101 m con el Giraldillo).
El 29 de diciembre de 1928 fue declarado Patrimonio Nacional y en 1987 fue incluido en la Lista del Patrimonio Mundial.
La Giralda es el antiguo alminar de la gran mezquita almohade de Sevilla. Tras la reconquista de la ciudad, la mezquita fue convertida en catedral y la Giralda se convirtió en el campanario de la catedral.
Es la figura simbólica de Sevilla, hasta el punto de que una norma implícita en el planeamiento urbanístico de la ciudad prohíbe que cualquier otro edificio del centro de la capital andaluza alcance su altura.